CUENTOS TUMBESINOS


Tumbes, está demás decirlo, es un espacio bendecido por la naturaleza; son afamados sus manglares, sus bosques, playas; sus múltiples especies de flora y fauna, su riqueza histórica, su gastronomía, por considerar sólo algunos de los más emblemáticos tesoros que alberga. Espacios que debemos impulsar conviertiéndolos en productos para disfrutar y compartir con quienes nos visitan.

De un tiempo a esta parte, empieza a generarse en Tumbes, una atmósfera de cambio, el que debemos de impulsar, se necesita contar con un mejor centro de abastos, un terminal terrestre, un mejoramiento del ornato, la seguridad ciudadana, la limpieza pública, contar con una cadena de cines, con un teatro; y gran parte de la población asi lo está identificando.

Es entonces, fundamental, considerar las inversiones que han sido difundidas o señalizadas en los medios de comunicación, y que deben llegar necesariamente. Inversiones en obras de infraestructura y sobre todo en un cambio de actitud cultural, de fortalecimiento de virtudes y pincipios; es decir, inveriones en Educación. Inversiones que no pasen por el filtro de la exoneración en licitaciones por emergencia, de diezmos, que no caigan en la malversación, la coima o la corrupción. Tumbes merece estar mejor, necesita estar mejor, requiere ser mejor, y así con él, todos los tumbesinos. Inversiones limpias, bienvenidas sean.